¿Te cuesta controlar tu pensamiento? ¿te vienen ideas obsesivas?

¿Tienes que hacer actos de control o rituales para tranquilizarte?

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Las obsesiones son ideas, pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes e intrusivos que la persona sabe que son producto de su mente e intenta ignorar o reprimir sin conseguirlo y que le pueden causar sufrimiento emocional. En ocasiones la persona se da cuenta que son ideas irracionales o absurdas pero

no puede evitarlas.

 

Las obsesiones más habituales son:

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• Miedos o temores obsesivos como por ejemplo:

  • Miedo a contaminarse o a contraer una enfermedad.

  • Miedo a tener impulsos descontrolados de carácter agresivo o sexual, por ejemplo miedo a hacerle daño a alguien o a un hijo, miedo a tener un impulso sexual indebido o una imagen pornográfica recurrente.

• Ideas obsesivas como por ejemplo la obsesión por el paso del tiempo o escrúpulos religiosos.

• Dudas obsesivas que pueden ser sobre sí se ha realizado un acto en concreto como cerrar el gas o la puerta, o sobre su tendencia sexual o sobre una decisión.

 

Las compulsiones son comportamientos repetitivos que la persona realiza como respuesta a su obsesión, como un intento por controlar una realidad que vive como amenazante. Pueden ser conductas como, lavarse las manos repetidamente, ordenar las cosas de una determinada manera las cosas,

comprobar que el gas esté cerrado; o actos mentales como contar números, repetir palabras, rezar, repasar un acontecimiento.

 

Una persona presenta un Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) cuando tiene obsesiones y compulsiones que le generan un malestar importante ya que suelen interferir en su vida personal y en sus relaciones con los demás.

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Tratamiento 

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En el tratamiento para las obsesiones y compulsiones es importante abordar las distintas aspectos del problema:

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• La emoción de base, que es el miedo y los pensamientos y conductas que pone en marcha la persona de control y evitación.

• En las sesiones y a través de tareas concretas se ayuda a la persona a darse cuenta como cae en su propia trampa de pensamientos obsesivos y  compulsiones y a salir de ella con actuaciones concretas.

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La atención psicológica te puede ayudar a eliminar tus obsesiones  y el miedo y a vivir con tranquilidad.

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